¿Crisis?...¿Para quién?

No cabe duda que desde mediados del 2008 y sólo Dios sabe hasta cuándo, el tema que ha acaparado la atención mundial, es la crisis económica.
Sin embargo, a estas fechas, los expertos en economía y finanzas así como los iluminados políticos y politólogos continúan mostrando una ignorancia extrema en cuanto al tamaño del daño en la economía mundial. “Aún no lo sabemos” es su reiterada respuesta. Si no lo saben ellos que se les ha conferido el control de la administración pública, entonces, ¿quién lo sabe?.

¿Cuál crisis?, ¿Para quién es la crisis?.
Para empezar, a nuestro alrededor para los políticos en el poder, para los Mesías populistas, para los aspirantes a puestos públicos de elección popular, para los hombres de “cuello blanco”, para los economistas frustrados, etc., el tema de la crisis les ha servido para llevar agua a sus molinos, no importa que digan sandeces, se amontonan en los medios pidiendo ser escuchados pues dicen tener la verdad y la solución. Al final, como ya sabemos, no contribuyen con ninguna solución, son mentes estériles que buscan el beneficio propio, es decir, el de ellos, ni duda cabe. Mientras, siguen montados en caballo de hacienda, viviendo como reyes viviendo y despilfarrando el erario del pueblo.

Por otro lado, para la industria mediática, la crisis es un producto que vende. Cada día nos encontramos con que la TV pública y privada, periódicos, medios virtuales, revistas, etc., presentan declaraciones nuevas, remastiques, pronósticos, soluciones mágicas, entrevistas con “gurús” que dicen tener la piedra filosofal, astrólogos y charlatanes con el “toque divino” para predecir futuro y destino. La verdad sea simple, hay riqueza para ellos generada por el tema de la crisis.

Entonces, ¿para quién es la noticia de una crisis similar a la de los años 30, pero de carácter mundial?, ¿para quiénes van los cuentos chinos, diciendo que miles de millones de dólares se han “esfumado” de la banca, y de la bolsa por asuntos de “mercado” provocando desempleo y carestía?. Una pregunta más, ¿el objetivo de la noticia de la crisis, es para que los afectados se “protejan”, o para que vayan preparando su mochada para pagar?.

¡Por su puesto que sabemos la respuesta! Si bien que nos sabemos la lección señores. Nuevamente esta crisis, es para el pueblo, para el ciudadano “normal”, el de a pie, el que está sujeto a las decisiones iluminadas de nuestros gobernantes y administradores, el que se levanta cada mañana con el “Jesús” en la boca tratando de conseguir el pan diario para su familia, el que no tiene un sueldo de garantía ni jugosos bonos de fin de año como nuestros políticos, el que tiene una responsabilidad simple y llana: conseguir el pan para los suyos y “sanseacabó”. Para ése, que el dónde y el cómo no le importan, sencillamente él sabe que no puede desistir de su objetivo sólo porque el mundo está en crisis.

A nuestros iluminados políticos y doctos en la materia se les olvida que el pueblo sabe perfectamente que es para él y sólo para él la crisis, pues no es la primera vez que lo han obligado a andar a través de ella, ya han experimentado lo más álgido y seguramente tampoco será la última vez, las conoce muy bien. Lo más amargo de tales situaciones las ha vivido el que menos tiene, no los políticos, no los ricos ni los magnates de las finanzas y los medios de comunicación, ellos ya se protegieron, ellos están a salvo.

Mundo sorprendente, ¿no es cierto?

Luis García V.

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